martes, 23 de febrero de 2010

Campeonatos Provinciales de Kárate de Castilla-La Mancha 2010.


Se han terminado los campeonatos provinciales de kárate en Castilla-La Mancha, los más complicados que yo recuerde en mucho tiempo.

La determinación de que la categoría infantil tuviese que hacer combates de Jiyû Kumite, ha pillado a muchos fuera de juego y algunos hasta han decidido no participar.

La nueva categoría de PRE-KUMITE, no se ha aplicado en estos provinciales y en su lugar se dejo paso a esta modalidad de Kumite. Es una práctica poco habitual en los gimnasios, hoy día, y eso ha dado lugar a que muchos no supiesen ni lo que allí se iban a encontrar, así que hemos tenido de todo.

Una labor por parte de los árbitros de enjuiciar el trabajo y en ocasiones hasta de enseñar, a los competidores. La amplia mayoría solo conoce del kumite, en su modalidad de Shiai-kumite.


Minglanilla, Cuenca (sector provincial de Guadalajara, Albacete y Cuenca).
En Cuenca se comenzó con muchos encontronazos y golpes que en “pre-kumite”, son contactos indiscutiblemente. Pero al final se consiguió que rebajasen el impacto hasta hacerse más o menos aceptable y llegando a comprender los coachs que es lo que se estaba pidiendo, pero al principio ganaban solamente los que pegaban…

Una vez comprendido el trabajo por todas las partes los combates no tuvieron más relevancia que aquellos, donde se excedieron de fuerza y contactos “muy fuertes”.

En el provincial de Ciudad Real, no hubo manera de frenar ni de bajar la intensidad de los golpes, llegando a ser muchas las ocasiones donde “dos golpeándose sin parar” era lo que comprendían, teniendo que para el árbitro para separarles una y otra vez. No se entendió el trabajo, no tenían muy claro el Prekumite, pero es que el Jiyû-kumite, aún menos. Los chavales armados (pues parecen armaduras) con tantas protecciones, entraban solo y exclusivamente en ataque y golpeando sin parar (se olvidaron de defensas y combinaciones, salidas o esquivas). Fue muy difícil dar ganador, no hubo manera de bajar esa intensidad… así que fue a criterio arbitral.

En el provincial de Toledo, campeonato súper masificado pero con mejor nivel que el resto de provincias. Se comenzó como siempre, con ganas y sin saber muy bien que se les pedía a los “jóvenes kumiteros”, así que de nuevo y tras unos primeros encuentros, se vieron competidores muy buenos.


Personalmente me gustaron como los competidores de Belvis de la jara, trabajaron desde el comienzo sabiendo lo que se les estaba pidiendo, de Cebolla, o del gimnasio Kidokan. Otros como ya había pasado en los otros campeonatos anteriores, estaban aprendiendo de lo que allí pasaba.

Yepes, Toledo.

Es una modalidad que impresiona y más en las edades más pequeñas con los pesos más bajos, donde se ven unos “chiquitines” que cuando les ves hacer bien el trabajo, da gusto.


Lo malo, los competidores que no saben, pegan y encima sus coach se ponen a gritar o despotricar, para ocultar su desconocimiento (gracias a Dios son los menos).

En éste de Toledo también hubo algunos clubes que no apuntaron a sus chavales al Jiyû-kumite, por temor o no saber cómo iba a ser aquello, como sería la “prueba”, lo cual me entristeció, más que nada por los chavales. Pero en ese campeonato lo que más hubo fueron competidores, con lo cual esa falta se noto poco...pero hubo chavales que se quedaron sin kumite.

Una cosas importante en el provincial de Toledo, celebrado en Yepes. Es la entrega del pueblo con el deporte del KÁRATE y como un ayuntamiento apoya el deporte y en especial el kárate. Como la concejalía de deportes, y el alcalde ayudan al kárate a estar considerado como se merece. Gracias a Don Antonio Rodríguez-Tembleco de la Oliva, el alcalde y al concejal de deportes, Don Jesús R. Juárez, por estar presentes durante el campeonato y animar a los competidores a continuar en la práctica del kárate y a los familiares seguir apoyándoles en sus triunfos.

La cantidad de jovencísimos karatekas, que a pesar de ser unos “ñajos”, aportan buenas maneras, Toledo tienen hoy día el mejor “caldo de cultivo” que puede tener un deporte, jóvenes monitores con ganas de hacer y estar, en el pódium. Si esos jóvenes (maestros y alumnos), siguen estando bien orientados el kárate provincial está apostando por tener la hegemonía “regional”, y si no, el tiempo lo dirá...


Provinciales que se terminan y se comienza con los regionales, esperando que aún sean mejores y ya buscando un resultado positivo para el nacional.