viernes, 9 de octubre de 2009

Hiroshi Shirai.


Bueno otra vez con el maestro, ha pasado otro año y nuevamente a reencontrar la dirección del camino.

Es sábado de madrugada y hoy será un día largo, muy largo y duro, se presiente pues los entrenamientos con el maestro siempre me dejan baldado. De antemano ya se que serán cuatro entrenamientos intensivos en un mismo día.

Mí buen amigo Juan José Charco me recoge bien temprano en la esquina, gracias que vivo en lo que es la zona de transito y a las 7: 20 ya estamos de camino a Alicante. Llegamos en poco más de hora y media, en las puertas del Club Atco. Montemar y luego casi media hora buscando aparcamiento.

Corriendo a cambiarse y saludar a la gente que te encuentras de pasada, no hay tiempo, pues el maestro como ya es habitual en él, hace mucho rato que está en el tatami calentando y estirando.

Paso a dejar las cosas y rápido a saludar al maestro.
Saludo riguroso a casi dos metros, y me acerco a estrechar su mano ¡¡Ohayoo Gozaimasu Shirai sensei!! A lo que él me devuelve un ¡¡Ohayoo Gozaimasu!!.

Le hablo en español (mejor para mí pues no se más japonés) ¡¡le veo mejor aún que la otra vez!!... y se sonríe, y me contesta, ¡¡si estoy mejor…mucho mejor jejeje!!.
Doy dos pasos de espalda y le vuelvo a saludar, dejándolo en sus estiramientos y su concentración, la cual he interrumpido en cambio él me sonrie amablemente.

Le veo y le siento aún más joven que hace un año en Caravaca de La Cruz, ¿será posible? y está como más contento (en Caravaca estaba un poco más triste), la verdad es que el pabellón está casi lleno. Tanta afluencia le gratifica en su esfuerzo. No se, yo se lo noto. O es posible que sea que éste sitio le es más familiar, ya como su casa, de las veces que él ha venido aquí.

Además es hora de rectificar otras cosa en éste blog..., que el año pasado le eché setenta y tres años, ¡¡¡que noooo!!!, me equivoque en las cuentas o yo que se. Tiene casi recién cumplidos setenta y dos años y dos meses. Que siempre terminamos hablando de los años que tenemos…

Entre tanto karateka conocido están los presidentes de la Real Federación de Kárate de España, Don Antonio Moreno Marqueño y el presidente de la Federación Valenciana de Kárate, Don Marcelino Gómez Martínez. Distinguidos karatekas como mí maestro ancestral Don José Baeza al cual saludo con un abrazo, Don Lorenzo Parra acompañado con varios de sus alumnos. Amigos y compañeros, y hasta árbitros nacionales. Tanto conocido hace que te sientas más a gusto en el estudio y el entrenamiento éste día.

El maestro sigue estirando y saludando a quien se acerca, y veo que ha venido acompañado por unos pocos alumnos, me alegro nuevamente, pues veo Alessandro Cardinale y varios alumnos más de Italia, y otro alumno que lo conozco desde que estábamos con el maestro Taiji Kase. Se llama Marc Stevens de Bélgica, un consumado experto en el kárate tradicional. Ambos Alessandro y Marc suelen ser los exponentes de las explicaciones de los diversos trabajos que hacemos con Shirai Sensei.

Quiero hablar un poco de Alessandro, cuando le veo sé que el curso estará bien pues es un gran ejecutor. Él comenzaba en el kárate el mismo año que yo, allá por 1978. Es decir que somos de la misma quinta. Ha estado diez años en el equipo nacional de Italia y fue miembro del equipo que derroto por primera vez al equipo japonés de kata. Es decir que es un hombre que está en los anales de la historia deportiva del kata.

Él es sexto dan de kárate desde 2000, pero sus rasgos de un karateka formado en el kihon y el kata.
Alessandro Cardinale y Antonio Milla 3 de octubre 2009.

Otro gran karateka que acompaña al maestro Shirai es Marc, ya lo he dicho antes Marc Stevens , es un karateka que siguió al maestro Taiji Kase y hace como muchos de nosotros seguir en la actualidad al maestro Shirai.

Es un buenísimo ejecutor, muy completo a nivel técnico, su mejor cualidad son sus patadas y su velocidad. Además de dominar la técnica del kárate Shotokan (en su apartado tradicional), donde su ejecución es impecable. Su Kime a la hora de trabajar en parejas y realizar los Bunkai, con un control magnifico le hacen ser un gran exponente.

En su formación comenzó en el kárate en 1967 con escasos doce años, pero ha sido muy constante y ha estado en el equipo nacional belga durante quince años, y en su haber tiene, trofeos en kata y kumite, en individual y por equipos. Es decir que ha estado al máximo nivel belga en todos los sentidos y a tocado todos los palos.

Su mayor logro ser 5º dan con los maestros Taiji Kase e Hiroshi Shirai, el seguimiento de los maestros por toda Europa y "sobre todo" su gran dedicación con el maestro Hiroshi Shirai (y de un alumno del maestro Shirai, que es el sensei Carlo Fugazzale) le han hecho ser Sempai del sensei Shiari. Vive en Bruselas donde lleva el gimnasio Kei Shin Dojo Kan.

También acompañan al maestros otros karatekas italianos, uno de ellos (no recuerdo el nombre) es cuatro veces campeón de Italia, modalidad en kata, y tampoco sé si es nacional o es de la liguilla de kárate tradicional. Lo que si sé es lo que se ve, una ejecución de kata Shotokan, real y acorde con el estilo, será lo que hace que Italia ahora mismo sea líder mundial “por algo” en kata.


Yo suelo estar casi siempre lo más cercano posible a ellos, más que nada, para copiar y tratar de imitar su forma de hacer. El maestro, hace ya, ha cambiado a un kárate de mayor nivel, es más que evidente. La gente que no le conoció antes, se puede llegar a sorprender y quien no haya estado con el maestro Kase, y ni sepa de estos trabajos, es posible que ni se identifiquen mucho a otros tipos de Shotokan. El maestro está en el Shi, en el espíritu de cada una de las técnicas, ya ha pasado de correcciones “posiciónales estéticas" a las "correcciones funcionales ”.

También volviendo al tema de lo técnico, hay veces (pocas), que alguno se atreve y le pregunta abiertamente, ¿y está técnica, está mano, el brazo va por arriba o por abajo?, pues él dice... yo lo hago así, por esto y esto… a lo cual puede llegar si no se entiende que es un choque con lo establecido por un grupo del Shotokan, algunos libros o videos, él ha estudiado cada gesto y movimiento contrastándolo con sus maestros y ha llegado a "estas conclusiones" las cuales expone y explica, solamente, si alguno de los allí presentes decide preguntar.

Es por ello que cuando estoy con alguien que no lo ha visto nunca trabajar, siempre deparo en la gracia especial, que él tenía, en el kumite, grandísimo experto en la técnica del kihon.

La cual adaptaba de manera fantástica, tanto para kumite como kata, pasando de una parte a otra sin darte ni cuenta. El kihon es sin duda alguna su gran baza, sus explicaciones (este año muy breves y rápidas) terminan de hacer ver lo que no entra por la vista.

Su trabajo se asemeja, o se continúa (mejor dicho), al del gran maestro Kase, pero con los toques personales de Sensei Shirai. Por ejemplo las explicaciones de los bunkais, siempre recuerda las palabras del maestro Kase.


Yo, de antes, le recuerdo con mucho dinamismo a la hora de la ejecución, de una severidad extrema en el kime (del Hikite y el Sukite, del giro la cadera, rodillas y hombros, etc). Ahora es casi los mismo, pero, de palabra casi ni mienta estos temas.

Palabras que repite y se te clavan “cuore” a “cuore” (que no sé si es italiano o japonés, pues Kore en japonés es "esto" y suena igual),otras más sencillas “si no hay atenccione no hay kárate”, “el kárate es impacto…”, a la vez que lo dice hace el gesto del contacto (al igual que lo hiciese en su día el maestro Kase).

Los que no le conocen (que son muy pocos), se quedan muy impresionados con esos vocablos del maestro, koji, eh koji y koji, kore, ancoara, ¿?. No deja de que la idea o las palabras reposen en nuestras cabezas y ya está, de nuevo, ejecutando y explicando conceptos para una mejor asimilación.

Aún me resuena sus palabras, l´insegnamento sitramette da maestro ad allievo da cuore a cuore (las enseñanzas del maestro se trasmiten de corazón a corazón), que grandes verdades, que razón y que el maestro se muestra contento tan solo de trasmitir "su sentimiento".

Ya decía un amigo, por muchos danes que uno tenga, si no hay alumnos no hay nunca maestro. Ese traspaso de conocimientos, que se van dosificando, hasta que no se ven hacer cosas bien, cosas como kihon y pasarlas al kata, hasta que no se hace bien una cosa no se puede hacer otra superior. Es donde el maestro dice que el kata es un “arte”, la ejecución de un kata debe trasmitir “belleza”, su ejecución debe aportar “gracia”, son palabras que si las dijese otro ya no sería lo mismo. Pero viniendo de él sabes que está hablando con "el corazón" y "el alma", puesta en el sentimiento y si él dice que es arte, será ARTE.















Así comenzamos a trabajar una serie de Kihon, donde el maestro resalta una y otra vez, los tipos de respiración y el trabajo se asemejaba a otros anteriores, casi es lo mismo, pero esta vez, tras unas ejecuciones frontales, al pasar el trabajo a aparejas, al defender había que retroceder en Yori-ashi en hiri-ashi. El cual es muy sencillo y no terminaba de salir, para colmo el segundo trabajo era de pierna. En una especie de cámara lenta, donde la importancia esta en el pie de apoyo y el enfoque de pierna.

Alesnado y Marc lo han clavado, la verdad que Marc los chudan, a esa lentitud y con esa precisión que dejaban la boca abierta a más de uno. El maestro al darse cuenta comentaba que... eran alumnos jóvenes y Marc le respondía que ya había cumplido los cuarenta y cinco, el maestro sonrie y dice – lo que yo decía…”muy jóvenes”. No importa la edad, si no, el espíritu. Ha reparado en la forma moderna de hacer los kata con las patadas chudan a jyodan, y ha corregido que las patadas han de estar a esa altura y con está precisión

Cada palabra estaba colocada en su espacio, cada explicación en su sitio. Siempre le traduce el sensei José Baeza, pero en esta ocasión no le dejó mucho tiempo. El maestro quiso desarrollar todo el trabajo, y no daba ni tiempo a repasar o tratar de hacer los trabajos dos veces, así que hacíamos uno cada vez. Un poco estresante, si además, no sale a la primera ya no había tiempo de repetir para que saliese bien.



En kata, se trabajo Kanku-dai por la mañana y Gojushijo-sho por la tarde.

En Kanku-dai, no es que se trabajase como antaño, enseñar (tenias que venir enseñado) era repasar y corregir, ahora son aspectos. Hoy tocaba la respiración, como se debe respirar en la ejecución del kata Kanku-dai.

Así de buenas, hasta parece fácil, pero el ritmo lo lleva él, con sus números y su ritmo, además controlando la exhalación y la inhalación de cada movimiento. Recalcaba una y otra vez la importancia del kata Sanchin de Goju-ryu, ese Ibuki e Ibuki-nogare, explicaciones que se hacían en hechos. Cuando uno se adelantaba el maestro, él repetía el movimiento, y la consabida bronca, ¡¡¡no avanti piu!!!. Si se hacia bien “cosji” ,”cosji”. También ha hablado del kata Tensho…Goju-ryu y su especial respiración.



El maestro habla de respiraciones…Ibuki-sankai, de cómo los kata tiene una riqueza en su interior, la cual debemos buscar, encontrar y saber valorar. Seguíamos inmersos en el trabajo, pero el maestro hablaba y hablaba de la respiración, ya llegados a estas, de las respiraciones. La ejecución del kata se descompensaba al tratar de llegar la respiración en el tiempo adecuado, es momento de inhalar, o hasta aquí exhalamos. La ejecución estaba como parte complementaria al trabajo de respiración.

La ejecución de Alessandro magistral, y el maestro decía de vez en cuando movimientos del kata que su ejecución o fases, contenían unas cantidades precisas de energía. Así al comienzo del kata, nos decía, que no debíamos comenzar con todo la energía disponible, como mucho con un 80% (a modo de la Formula 1, cuando el coche sale cargado, la salida será lenta) y como a medida que el kata se va ejecutando, es muy importante la respiración, una precisa respiración para poder llegar al final del kata con fuerza y energía.

En un par de pasajes ha sacado al alumno más jovén para que demostrase, más velocidad en ciertos pasajes del kanku-dai, su ejcución y ejemplo magistral.

Otro aspecto ha sido la posición su asentamiento y su enfoque, como parte fundamental del kata, recomendando una y otra vez no abandonar la practica del saco y el makiwara.

La vital importancia del Shin-Gi-Tai, ya lo había nombrado varias veces en el kihon, aquí, en el kata lo repetía una y otra vez. El espíritu, la mente y el cuerpo unidos en uno, la única visión es vencer, antes en alguna ocasión dijo Shi-Kokoro-Tai durante el kihon. Para el sentimiento de corazón (kokoro) es lo más importante.

Me ha gustado que en una posición del kata, que además sale en otros kata, nos dijese, que esa posición era, se llamba, “la lengua del dragón”.

Si, yo ya había oído algunas veces de las posiciones del dragón, en Taichi o Kung-fu, la posición del dragón es muy normal. En kárate es la primera vez que oigo "posición del dragón". También en Goju-ryu está el kata Sanseru, que se dice, es el kata del dragón. En Shotokan nunca antes había oído que una posición del kata kankudai ni ningún otro se nombrase así y estoy estudiando en cuantos kata sale, de momento ya van otros dos más.

Un descanso de diez minutos, donde se agradece de manera especial que el curso tenga unos refrigerios, desde gelatina hasta arroz con leche, y eso gratis. Un “sponsor” en el kárate tradicional. Ya puestos digo la marca…POSTRES REINA.
http://www.postresreina.com/


Senseis Miguel y Vicente.

No comer mucho que seguimos ya, se retoma la segunda sesión con el kata Kanku-dai y su lujo de detalles en el Bunkai. En este apartado el kata el maestro no deja de explicar que cuando en 1960 comenzó a trabajar con el maestro Kase, él, no dejaba de repetirle de los tiempos que estaba junto con Egami y Okuyama, de cómo se trabaja un kárate real, que la técnica debía tener una efectividad 100% (como el algodón).

Así que el maestro Shirai con esas premisas y su esfuerzo han ido consiguiendo dar un aspecto sencillo y practico, construyendo un bunkai que sea real y efectivo basandose en aquellas explicaciones del maestro Kase.



Nuevamente el maestro nos dice las mimas recomendaciones que cuando estábamos en el kihon, el kime del atacante y el kime de la defensa, es decir que más Ki y más Kime. Ya los antebrazos empiezan a escocer un poco, la única solución es tratar de defender con diversas partes pues siempre con la misma ya no puedo, y la muñeca se ha hinchado un poco.

Seguimos igual y no hay opción a repetir, así que una vez hace uno y otra el compañero (mí compañero me saca unos centímetros)alto, hasta más fuerte y mucho más joven, nada un primor entrenar con él... pero me está rompiendo la muñeca.

Terminamos y la mañana está hecha condolido por varios golpes y un suelo duro,黙想 mokusō de rigor y a las duchas.



Senseis

Hiroshi Shirai

y

Francisco Gabriel









Sensei Ángel Escribano y el maestro Hiroshi Shirai.

Nos vamos a dejar las cosas al coche y a tomar un refresco, después de pasar una larga hora hablando del kárate y del curso, del maestro y de todo un poco decidimos ir a buscar un restaurante que este cerca.

Un corto paseo y nos vemos de frente con “los peces gordos”, es una cosa que no entiendo… Cuando vienen estos maestros, autoridades del kárate. ¿Por qué se los llevan a comer como a escondidas?, entiendo que seamos muchos, pero hay gente que debería estar, vamos creo yo a opinión personal...

Que la cosa es que en vez de estar con el maestro, estuvimos entre amigos, amigos karatekas y hablando del kárate, nuestro kárate. El que practicamos, del que enseñamos, hasta del que arbitramos, nuestro kárate diario y el que vivimos.

Así que con la estimable compañía de los señores presidentes, el señor delegado de Alacant, Don Francisco Gabriel González, Vicepresidente de la FKCV, sobre todo un amigo. También venían del Gimnasio Yoshitaka de Cheste, Miguel Ángel Gómez y Antonio …nosotros Juanjo y yo.

Unas tapas que nos hicieron de comida, pues a la tarde venía otra pequeña paliza. Así que disfrutamos de todas las conversaciones, recordamos tiempos ancestrales, a un tal Fructuoso Franco, un Hugo Ricardo Anglés, Felix, etc. que es la otra riqueza de éste arte-deporte (es como hablar de la mili...). Estar con los que quieres estar y disfrutar, a eso creo que lo llaman ser feliz.

Después el vicepresidente, delegado, maestro y amigo Francisco se empeño en tomar café en su casa, y pude ver algunos de sus “tesoros”. Yo que soy muy aficionado a las katanas, nunca había visto una como la que él tiene, y un trofeo en forma de kabuto (fantástico), entre otras tantas joyas.



Tras el reposo la clase, hay que estar puntual, da igual el maestro ya está allí y calentando. Aprovecho y hago unas fotos, a personas que llevamos juntos ya treinta años, quien lo diría. Si, en éste suelo me examiné de cinto azul y cinto marrón, el maestro Baeza era el examinador. Tiempos ahora lejanos que se recuerdan con agrado
y a compañeros que se han ido perdiendo en el tiempo (es que éste sitio me trae nostalgia de juventud).

La clase comienza como siempre, Mokutso y calentamiento, en la tarde le toca Marc, no es por nada pero que ya se comienzan a notar las agujetas de la mañana, pero él es un profesional y es consciente de las sesiones mañanaeras, nos ha dejado respirar y el calentamiento con el calor lo hace bastante suave y a base de estiramientos, aún así, todo estamos sudando.

La tarde se comienza con un poco de trabajo de kihon de piernas y brazos donde hay que ir trabajando ambos, tanto en ataque como en defensa, es un kihon básico creado para el paso de grado, Shodan, en la asociación del maestro.

Su característica principal es que hay que golpear, tocar, “sentire” al adversario, así que de momento veo que los dos compañeros de al lado se están dando y se dan de lo lindo, el ojo del más joven sangra (ese que es cuatro veces campeón de Italia), un golpe le ha llegado y le a impactado bien. Mis brazos hace ya un buen rato dijeron ¡¡basta!!, pero el compañero aún aguanta, pues hay que seguir…por fin el maestro nos llama “ancora”, y suena celestial.

Vamos hacer kata Gojushijo-sho, siguiendo con el trabajo de la mañana, “la respiración”, éste kata tiene mucha más miga, pues hay muchos cambios de ritmos y tiempos, de nuevo el kata de ejecución va por un lado tengo toda la concentración puesta en seguir el ritmo y la numeración del maestro en la respiración.

Es bastante difícil esa respiración de hara, concentrada, parada y una leve espiración y golpeo al máximo de kime, para relajar y inspirar rápidamente. Al menos el kata esta saliendo bastante bien y el maestro está, o se le, ve muy contento. Se ha dado cuenta que dominamos el kata y nos felicita.

Un descanso de diez minutos y a toda la peña a los Postres Reina…

Se retoma la clase y tras un minucioso trabajo y hasta que el maestro ha visto preciso, se ha estado repitiendo. Los pies están que echan humo, y aún nos queda el bunkai. El maestro de nuevo ayudado por Marc y Alessandro, repetía una y otra vez explicación y trabajo, pero luego no dejaba tiempo para hacerlo los dos, así que yo lo he ido haciendo todo, ya conocía éste trabajo por lo cual perfecto.

Ya muy cansados, se termina, no sin antes una sesión de estiramientos de Alessandro que ya no podíamos ni seguir más de la mitad. Tras lo cual el Mokutso y el Dojo Kun, se ha dado las gracias al maestro y unos presentes. También a las autoridades del kárate allí presentes.


Compañero todos, pero se ven caras nuevas y compañeros manchegos como Paco Carretero acompañado de amigos, David Gento e Isidoro, que han podido disfrutar de éste día.


Luego las fotos de rigor, que la verdad el maestro aguanta estoicamente.

Entrega de detalles al maestro y éste a algunos de los asistentes...


Despedida del maestro y de los compañeros, ducha y regreso a casa rápido son las 22:30 y ya estamos de nuevo en Albacete.

Antonio Milla Jiménez, 9 de octubre del 2009.