Por motivos laborales,
Antonio Escoriza, lleva un par de años viviendo entre León y Colombia o Perú. Su experiencia en este mundo del karate de todas las edades ha hecho que la Federación Peruana esté a su lado. Ilusionado y cauto a la vez, el karate no deja de tener importancia en la vida de Antonio. Así lo señala Escoriza que respondió a la llamada de SportLeón contando cuál es su presente y para adivinar el futuro que le espera en un año lleno de ilusión en Perú.
¿Cómo llega un leonés a la selección de Perú?
Por varias carambolas, primero en el 2007, Telemark me pide que ponga en marcha su primer centro en Latinoamérica, allí tengo la oportunidad, gracias a un amigo, Ángel Arenas, que va allí a dar un curso, de conocer a la directiva de la Federación y sus Técnicos. En el año 2008 me piden que les de un curso a los Técnicos, en el 2009 un curso a los juveniles, en el 2010/2011 la selección viaja a España durante 15 días al gimnasio
Máster 10 como parte de su preparación del año; el año 2012 me piden que les acompañe como coach en el campeonato sudamericano celebrado en Lima y este año cuando han conocido que estaría en Lima un año, me han hecho la propuesta de ser el seleccionador de mayores.
¿Cómo calificaría este nombramiento? Es un honor que en un país que no es el mío reconozca el trabajo que realizo, y más aun cuando ese trabajo es algo muy importante en tu vida. El Karate, además de un deporte de competición, para mí, es un camino, en el cual me voy desarrollando como ser humano. El nombramiento lo califico como un regalo del destino.
¿Es el mayor reto de su carrera como entrenador? Es un gran reto. Hay que tener en cuenta que cuando a uno le llega esto, cree que ha conseguido algo muy importante, pero la realidad, es que lo que ha conseguido es la
“Posibilidad” de conseguir algo importante, y para eso hay que trabajar mucho y tener fe en lo que se hace.
¿Qué expectativas tiene con la selección de Perú? Las expectativas, siempre tienen que ser altas y muy ambiciosas. La competición, no tiene límite en cuanto a objetivos o metas, mis expectativas son grandes. Aunque de momento, el planteamiento es realista y hay que ir poco a poco Este año nuestro reto está en el campeonato Bolivariano, que a nivel región es el campeonato más importante del año, más aun que un Campeonato Sudamericano. Pero lo que realmente me gustaría conseguir, es que estos chicos y chicas, crean en sí mismos como merecen.
¿Cuál es el nivel de los karatecas peruanos? El deportista peruano es un buen deportista, es abnegado y trabajador, tiene capacidad de sufrimiento y resistencia, su nivel técnico no es malo, pero les falta experiencia en alta competición. Y como te he dicho en la anterior respuesta, lo importante es conseguir que se den cuenta del verdadero nivel que tienen. Que es bastante alto.
¿Hay alguno que pueda lograr éxitos a corto plazo en algún gran campeonato? Ya se están consiguiendo. Ya empieza a haber pequeños logros pero hasta que no consigan un Oro en Kumite a nivel Mundial no habrá una consolidación real, Hay varios/as competidores/as que han conseguido medallas en Panamericanos y Mundiales. Sin ir más lejos este mes, Isabel Mallory Aco, se ha colgado una medalla de bronce en los juegos mundiales en Colombia, Alexandra Grande, consiguió un bronce en el mundial de Marruecos, Alexandra Vidriola en Malasia.
¿A qué plazo planificará su trabajo? El planteamiento es de momento a un año. En mayores el objetivo del año sería conseguir clasificar a “varios” para el mundial de Alemania, hay que tener en cuenta que aquí es difícil, lo que en otros sitios es fácil. Para que un competidor Peruano pueda ir a un Mundial tiene que clasificarse en un sudamericano y en un Panamericano de los dos primeros, no es suficiente con ser el campeón del país.
¿Cuál es el secreto de su método de trabajo? No hay secretos, creo que la mejor de las praxis, es el trabajo y sobre todo, es el ser honesto con uno mismo, hay que hacer lo que uno cree que tiene que hacer, con el riesgo de equivocarse, y mirar al frente con toda la fe del mundo, el mejor de los caballos de arrastre es la ilusión, creer en lo que haces y así, conseguir que te sigan.
¿Hay mucha diferencia entre el carácter del karateca español y el peruano? Si la verdad es que si son diferentes, pero eso reside en la diferencia de modos de vida, y eso a su vez, marca mucho las pautas de trabajo. Al final ese es mi mayor hándicap, poder “comunicarme” de una forma lo más global posible, que todo lo que quiero que se entienda, se pueda entender.
¿Su puesto de seleccionador le obligará a vivir de manera estable en Perú? Gracias a que estoy viviendo de manera estable por mi trabajo en Telemark, en Perú, puedo ser seleccionador.
¿Cuál es su primer recuerdo del karate? Una exhibición que pude presenciar en el Palacio de Deportes de León, hace muchos años.
Defíname en menos de 50 palabras qué es el karate para Escoriza
Algo que comenzó siendo una evasión, y se ha ido convirtiendo en un vehículo de desarrollo personal, aun diferenciando lo que es karate, de competición, si puedo decir que el karate, es el camino.
¿Cuál es su mejor recuerdo en el mundo del karate? Tengo varios, muchos, diría yo, he tenido la suerte de tener muchos y grandes alumnos, que han conseguido cosas muy importantes, si lo pusiera todo, ocuparía más que toda la entrevista, pero evidentemente si hay que resaltar algo, es la medalla de oro de Jorge Fernández en Kata, en el Mundial de Bulgaria, estar lejos de casa y oír el himno de tu país porque un alumno se lo ha ganado, es lo máximo., Así como la de pro de Miguel Carcedo en el Europeo de Kumite, pues a ese campeonato no pude ir. Y el Campeonato de España de Clubes que ganaron las chicas en Granada o el campeonato de clubes del 2007 que no pude ir porque estaba en Lima y mi hija me llamo para decirme que habían conseguido el bronce…. Aunque hay muchos más. Mi examen de 5º dan…etc.
¿Un sueño? Mis hijos son estupendos, ya son mayores 28 y 23 y son dos seres humanos maravillosos, mi mujer es un cielo… y me apoya, el resto de la familia está bien y de momento la salud está correcta, y estoy haciendo lo que me gusta, ¿para que voy a pedir sueños? En el trabajo, lo que tenga que ser, ya ira siendo.